EXPERIENCIA
UN EPISODIO DE VELÁZQUEZ














ANGÉLICA HERNÁNDEZ BENITO
Museo Nacional del Prado
UN EPISODIO DE VELÁZQUEZ
RESUMEN / Un episodio de Velázquez nace dentro de ¿Quedamos en el Prado?, un programa que ofrece distintas iniciativas dirigidas a jóvenes entre 13 y 17 años. Se planteó para presentar la vida del artista a través de su obra y que los participantes fueran capaces de hilar conceptos y situaciones hasta llegar a imaginar un episodio de la vida del pintor.
En el espacio educativo se daba comienzo a la actividad con una introducción histórica sobre el Siglo de Oro, para así poder enmarcar la situación cultural y política que le tocó vivir a Velázquez. Una vez situados en el tiempo se daba paso al recorrido por las salas, donde a través del contacto directo con las obras se pretendía despertar el interés y la curiosidad de los jóvenes por el que es uno de nuestros artistas insignia. El itinerario se planteó para tener una visión global de la obra y de la figura del artista.
Posteriormente, se realizaba un taller en el que cada joven debía inventar "un episodio en la vida de Velázquez" y darle apariencia de cómic. Puesto que el Museo del Prado cuenta con la colaboración tecnológica de Samsung, cada joven utilizó una tablet con apps específicas de dibujo y de creación de cómic con las que realizaron su trabajo. Una vez concluido el proceso de creación, los resultados se alojaron en un microsite que permite acceder y compartir su obra en redes.
TRAS LA ACTIVIDAD, LA EXPERIENCIA / El programa ¿Quedamos en el Prado? surgió en 2007 con el objetivo de acercar el público joven al Museo, a través de actividades específicas que lograran atraer su atención y despertaran el interés por la historia y las colecciones de la institución. Por diferentes motivos, el programa sufrió un receso, existiendo por ello un vacío de actividades dirigidas a este tipo de público desde el año 2011 hasta 2015. Surge entonces la idea de retomar el con fuerza y nuevas ideas adaptadas a los intereses del público joven. Para ello, se optó por arrancar con Velázquez, sin duda, uno de los referentes del Museo.
La idea de una actividad que uniera los intereses educativos del Museo con los intereses de este público tan especial fue tomando forma gracias a la presencia de los recursos tecnológicos que Samsung aportó al Área de Educación; se trataba de la unión perfecta que permitía aproximar el Museo a los jóvenes de una manera menos convencional y que resultaba de gran interés para este público.
El resultado de esta unión y el desarrollo que siguió la actividad nos hizo recapacitar a la hora de establecer una metodología que llevase a cumplir los objetivos planteados para el público adolescente. Con ella se consiguieron unir tres vías cuya conexión, en principio, parecía difícil. Se logró crear un proyecto partiendo de una base tradicional en la que la visita a las salas es el pilar fundamental. Uno de los objetivos principales es conseguir que los jóvenes aprendan a disfrutar y a emocionarse con las obras y que esto les lleve a incluir el Museo dentro de sus planes de ocio, que sea para ellos un lugar de encuentro y que aprendan a vivirlo con sus amigos. El enfoque que se le dé a estas las visitas debe ser dinámico e irse renovando y adaptando tanto a los nuevos tiempos como a las especificidades de cada grupo.
Se consiguió captar la atención de los jóvenes a través de la unión de la visita con experiencias más lúdicas y participativas, realizadas en el taller.
Por último, se obtuvo una total conexión con los jóvenes al utilizar las que para ellos son herramientas cotidianas y al programar una experiencia más libre y creativa. La experiencia en esta actividad nos ha hecho ver la importancia del triángulo Museo, jóvenes y tecnología.
La actividad traspasó los muros del Museo y se puso en marcha en los talleres educativos del 34 Salón del Cómic de Barcelona con un rotundo éxito a todos los niveles. Esta experiencia nos abrió caminos alternativos con los que seguir trabajando y nos reveló la certeza de que cuando nos dirigimos a este público hay que buscar recursos que nos acerquen a su realidad. Esta actividad ha marcado un antes y un después, nos ha hecho replantearnos las vías de acceso a un público que requiere una mimada atención. En definitiva nos ha hecho repensar el Museo para nuestro público joven.